Palabras desde otro mundo

Gatchaman

A ver. Levantad la mano todos aquellos que hayáis dicho dicho ¿Lo cualo? Al leer este título.
¿Y si os digo: Comando G?
Ahí sí, ¿verdad?
Pues este era el titulo original que se le dio a la serie en su Japón natal: Equipo científico ninja Gatchaman. Si es que estos japoneses son la leche poniendo nombres.

Corren tiempos difíciles para la educación.
Los bastos y los bordes. Los zafios, los n4matikos y el resto de tribus malhabladas se van apoderando poco a poco del uso del lenguaje, corrompiendo todo aquello a lo que se acercan.
Ya casi no se entiende a aquellos que hablan con corrección. No sólo eso, sino que se les tilda de snobs y repelentes.
¿Estaremos asistiendo al final de una era de la comunicación hablada?
Bueno, pues parece que la cosa va un poco más lenta de lo esperado. Los textos ya están entregados en la oficina del registro de la propiedad (a la que “ellos” llaman intelectual), pero por consejo de mi asesora legal, esperare a que me den el papel de aprobación (o lo que sea que den) antes de comenzar a enviarlo a las editoriales.
Ahora me ha surgido una duda más.
Me comentó Ángel Rodríguez (el amigo que llevo los textos a registrar) que convenía que me uniese a ese ente maligno de chorizos y gentes de mal vivir llamado SGAE.
Se está acercando (póngase música de tiburón)
Ya falta menos (y no me refiero para San Fermín, aunque para eso también queda menos).
Este viernes Zapata y yo acabamos de corregir los relatos de ci-fi.
Con un poco de suerte mañana los registraré, y llamaré a los amables señores de Planeta de Agostini para que me digan lo que hay que hacer para mandar textos originales que deseen de ser publicados.
Caratula del juegoCorría el año ochenta y ocho. Yo aún estudiaba, la Micro manía comenzaba su segunda época (en la que tenía formato de periódico), los ordenadores de ocho bits eran los que mandaban y yo tenía en casa mi maravilloso Commodore 128 (con casete, disquetera de 5,25, monitor a color y el cartucho para meter pokes).
Según el diccionario de la RAE:

Sentido, da. (De sentir).
1. adj. Que incluye o expresa un sentimiento.
2. adj. Dicho de una persona: Que se resiente u ofende con facilidad.
3. m. Proceso fisiológico de recepción y reconocimiento de sensaciones y estímulos que se produce a través de la vista, el oído, el olfato, el gusto o el tacto, o la situación de su propio cuerpo. Sentido del equilibrio.
4. m. Entendimiento o razón, en cuanto discierne las cosas.
5. m. Modo particular de entender algo, o juicio que se hace de ello.

Book of conquests¿Quién es este tío?
No se vosotros, pero yo si me lo pregunté cuando vi las primeras ilustraciones suyas que llegaron a mis manos. Igual este tipo es un maestro reverenciado por los entendidos (a fe mía que debería serlo), pero en mi ignorancia no he oído hablar de él nunca. Han pasado ya bastantes años desde que un conocido me trajo, tras su estancia en Irlanda, dos libros de ilustraciones de este buen señor, y aún hoy no me canso de mirarlos.
Hace unas cuantas semanas (bueno, más concretamente el año pasado, así que, bastantes semanas) os hablaba de una de mis “filosofías de vida”: El camino del hombre consciente. Hoy os voy a hablar de otra de esas “maneras de vivir” mías, que he dado a llamar: La senda del tipo duro.
¿Qué de que va esto?
¿Acaso he caído en el reverso tenebroso de lo que sea?
Que nooooo. Que no voy por ahí quitando los caramelos a los niños pequeños, ni haciendo el abusón.

Empecemos por el principio, como en los tiempos.

¿Qué es lo que he vuelto a hacer?
Pues enmarronarme a mi mismo con otra tareíta semanal. Como no tengo suficiente con esto de escribir algo cada semana, y tratar de decir cosas interesantes y/o/u inteligentes, me he puesto a escribir una columna más cada semana.