Daegon, mes CCCLX

Por Javier Albizu, 10 Julio, 2022
No. Supongo que técnicamente aún no tocaría el treinta aniversario de Daegon (o, lo que vendría a ser lo mismo, el mes trescientos sesenta).

Si nos ceñimos al mes de publicación de “Hijas de la noche”, tendríamos que esperar hasta noviembre de este año para celebrar tan magno evento. Por otro lado, como las bases y elementos más antiguos que han terminado por formar parte de esta ambientación tenían su semilla en cosas que comencé a elucubrar allá por el año noventa1, supongo que podemos hacer un poco la vista gorda.

Sea como fuere, y dado que esta semana he alcanzado un nuevo hito en la escritura de material para este mundo, he decidido retomar estas entradas y hacerlo en un número más o menos redondo. Pero, ates de llegar hasta ahí, hagamos un breve resumen de acontecido entre la anterior entrada (Daegon, Mes XXX) y el día de hoy. Entre el ya muy lejano julio de dos mil dieciocho y este julio del veintidós.

Vaya, hasta este momento no me había dado cuenta de que los meses coincidían. Qué cosas.

Cuando dejábamos estos lares me encontraba inmerso (una vez más) en responder a la gran pregunta. En tratar de resumir “Qué es Daegon”2.

En diciembre del dos mil veinte, cuando aquella “respuesta” ocupaba trescientas cuarenta y una páginas (y doscientas dieciocho mil setecientas seis palabras), decidí replantearme todo el asunto de nuevo. Porque el acercamiento que había adoptado a la hora de dar con esta respuesta había cambiado enormemente y, entre otras muchas cosas, quedaba claro que había fracasado en aquel propósito a varios niveles.

Por un lado, aquello distaba mucho de ser un “resumen introductorio” a la ambientación (y aún me quedaban por describir las culturas de tres de las grandes islas, y los dos continentes retornados).
Por otro, seguía sin ser capaz de despertar el interés de la comunidad rolera.
Por último, mi moral cada vez estaba más baja.

Así pues, no fracasé solo porque no terminase con todo lo que tenía pendiente a ese respecto, sino porque, por el camino, el impulso y los ánimos se habían ido diluyendo paulatinamente. Eso sí, el trabajo estaba ahí. Dado que en aquel julio del dieciocho solo tenía veinticinco páginas de aquel “Qué es Daegon”, la operación era sencilla. En el año y medio posteriores había escrito más de trescientas páginas adicionales.

Los datos están ahí y es donde se puede ver con claridad el auge y caída de mi ánimo:

Segunda mitad de 2018: 119 páginas
Primera mitad de 2019: 169 páginas.
Segunda mitad de 2019: 51 páginas

Con esto, dos mil veinte empezaba con un nuevo cambio de planes. Si con la parte rolera pura no lograba despertar el interés de la gente sobre mi criatura, trataría de llegar hasta ellos a través de la narrativa. Empezaría a escribir una serie de relatos. Las historias que en su día me planteé utilizar para preparar el camino hacia “La novela”3.

Si bien es cierto que una parte de este proceso, dudas y mortificaciones lo fui recogiendo y plasmando en algunas de las entradas de “Nunca a la última”4, tras el final de aquel boletín en mayo del veinte, llegó el silencio de radio, pero no el proceso en sí mismo.

Una vez realizada esta introducción, vayamos resumiendo la crónica de otro fracaso anunciado. Porque, por supuesto, aquello tampoco ha terminado resultando como uno esperaba. Aunque igual este resulta siendo un cambio para mejor.

Solo el tiempo lo dirá.

La primera fase de este fracaso venía ligada a la extensión del proyecto. Porque el primer “relato” se me empezó yendo de las manos. En marzo de aquel mismo año terminaba con la primera versión del primer capítulo. A finales de marzo del año siguiente (el día veintitrés para ser más exactos) llegaba hasta el final de la primera versión del “relato”. De una historia que, en aquellos momentos se extendía a lo largo de cien páginas. Pero los números son engañosos. Porque, si nos quedamos con el conteo de palabras, aquello tenía sesenta y cinco mil quinientas setenta y ocho concatenaciones de letras. Algo más de trescientas páginas de acuerdo a la “medida Stephen King” (doscientas palabras por página)5.

De cualquier manera, y más allá de estos excesos, no estaba para nada contento con el resultado, así que decidí pegarle un repaso a aquello. Un repaso que terminó el día cuatro de este mes con el resultado de:

69.022 palabras
108 páginas.
942 revisiones
1.001 horas, 44 minutos y 6 segundos de tiempo de edición.

Descartes del relato: 97.413 palabras y 199 páginas.

No. Tampoco estoy contento con el resultado de este “segundo borrador”, aunque esto no me ha impedido liberarlo y comenzar a pedir a amigos y conocidos sus opiniones de cara al... . A lo que seguramente terminará siendo el tercero (de “x”) borrador(es).

A su vez, y como se puede concluir tras analizar estos números, los datos correspondientes a la escritura durante estos años, a pesar del cambio de cambio de rumbo y los altibajos, no han sido para nada superiores a los previos:

Primera mitad de 2020: 47 páginas.
Segunda mitad de 2020: 84 páginas.
Primera mitad de 2021: 72 páginas.
Segunda mitad de 2021: 61 páginas.
Primera mitad de 2022: 36 páginas.

Una vez llegados hasta este punto llega el momento de hacerse una nueva pregunta.
Muy bien. Y, ahora, ¿qué?

¿Me tomo un descanso?
¿Espero a los comentarios de la gente que vaya leyendo el segundo borrador para lanzarme a la siguiente revisión?
¿Empiezo con otro de los “relatos” que han de abrir paso hasta la novela?

La respuesta es “ninguno de los anteriores”... aunque en realidad lo que he comenzado a hacer se simultaneará la segunda opción.

Mientras espero, he decidido volver a la parte rolera pero. Aun así, en esta ocasión he optado por centrarme en aspectos ajenos al propio trasfondo del mundo. He decidido retomar el “Jugando en Daegon” cuya última modificación era de agosto del dieciocho, y del cual no llegué a publicar nunca nada en la web.

Y he de reconocer que se me ha hecho raro este cambio en el enfoque de mis quehaceres diarios. Me ha costado varios días decidir el acercamiento que he de adoptar, y el buscar la manera en la que he de plasmarlo... y aún no tengo claro que le haya pillado el punto. Porque esto no tiene nada que ver con lo que he estado haciendo durante los últimos dos años y medio, y eso es algo que pesa mucho.

No sé cuánto me costará hacerme con ello pero, ya sabes, retroceder nunca, rendirse jamás.

Enlaces:

1. Primeras andanzas
- Biografía rolera VI: Dirigiendo
- Biografía daegonita I: El tiempo antes del tiempo
- Biografía daegonita II: Génesis alpha

2. Respondiendo preguntas
- ¿Qué es Daegon? I
- ¿Qué es Daegon? II: El hoy
- ¿Qué es Daegon? III: Geografía y axiomática
- ¿Qué es Daegon? IV: Sociedad, conocimiento y misticismo
- ¿Qué es Daegon? IV: Daegon Occidental
- ¿Qué es Daegon? IV: Daegon Oriental
- ¿Qué es Daegon? IV: Las islas – Thurgold
- ¿Qué es Daegon? IV: Las islas – Shatter

3. La Novela
- Biografía daegonita LXXI: La novela I
- Biografía daegonita LXXII: La novela II
- Biografía daegonita LXXIII: La novela III
- Biografía daegonita LXXIV: La novela IV
- Biografía daegonita LXXV: La novela V
- Biografía daegonita LXXVI: La novela VI
- Biografía daegonita LXXVII: La novela VII
- Biografía daegonita LXXVIII: La novela VIII
- Biografía daegonita LXXIX: La novela IX
- Biografía daegonita LXXX: La novela X
- Biografía daegonita LXXXI: La novela XI
- Biografía daegonita LXXXII: La novela XII

4. Nunca a la última

5. El rey y sus medidas

El contenido de este campo se mantiene privado y no se mostrará públicamente.

Plain text

  • No se permiten etiquetas HTML.
  • Las direcciones de correos electrónicos y páginas web se convierten en enlaces automáticamente.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.